jueves, 28 de marzo de 2013

Trailers: Before Midnight


Ya han pasado, como viene siendo habitual, nueve años desde que supimos por última vez de Jesse y Céline. Los personajes de Richard Linklater se conocieron en 1995, cuando unos veinteañeros Julie Delpy y Ethan Hawke coincidieron en un tren en mitad de Europa en Before Sunrise. Nueve años más tarde, el director y los actores volvieron con una continuación, Before Sunset. En las vidas de Céline y Jesse también habían pasado nueve años, y en esta ocasión se encontraban en París.
No es de extrañar, pues, la expectación que crea esta tercera entrega de una saga tan redonda, tan delicada, tan excesivamente romántica, muestra de un cine que cada vez encuentra menos lugar. Before Midnight viene a ser la muestra de que el cine de autor no es sólo un elemento de culto, sino la posibilidad de desarrollar a los personajes con la atención que estos merecen, y que el público responde.
A continuación, el trailer, esta vez en Grecia:




miércoles, 27 de marzo de 2013

Trailers: The Wolverine

Tras la decepción que supuso X Men Origenes: Lobezno, vuelve Hugh Jackman a encarnar al mutante de Adamamtium en la nueva entrega cinematográfica de su spin off. Sorprende la capacidad del actor australiano para encarar proyectos tan dispares (su último protagonista ha sido el musical Los miserables). The Wolverine parece devolvernos al mejor Lobezno y trata de recuperar el tono de la saga X-Men más próximo al cómic que a ejercicios forzados de estilo cinematográfico.

domingo, 24 de marzo de 2013

Críticas del Odio: Terminator Salvation (2009)

[Esta crítica fue escrita al poco del estreno]

 

GRAN ALERTA DE SPOILERS
(Pero, para ser honestos, que te hagan spoiler de esta película no es que sea algo malo)


Servidor es confeso admirador de las primeras entregas (incluso, sí, lo digo, la tercera me divierte, quizás más que nada por ser un elemento paródico de sus dos magnas predecesoras, obras del genio James Cameron), por lo que fui al cine con la esperanza de que McG y Christian Bale renovaran el mito y el espectáculo. Pero, ay de mí, no debí poner mis ilusiones en manos de un director de cine con mote de coleguita (McG es el diminutivo de su apellido: Joseph "McG" McGinty Nichol)… En fin, allá vamos.

Para empezar, si habéis visto el trailer, ya habéis visto la película. Efectivamente, la moda de contar las escenas clave y el final en los trailers sigue vigente. Por eso mismo no quiero que nadie me venga lloriqueando con que he soltado grandes spoilers; no voy a decir más de lo que la campaña de marketing se ha encargado de decir por si sola.

Nos encontramos en el año 2018. Las máquinas, comandadas por la Inteligencia Artificial Skynet, han exterminado a la raza humana. Los pocos supervivientes mantienen una débil resistencia contra las mismas y ponen sus esperanzas en John Connor, el hombre que durante años les ha estado contando sus experiencias con los Terminators enviados para matarle. Un buen día, los líderes de la resistencia obtienen, gracias a un informador anónimo (?), una clave que les permitiría desconectar Skynet y liberar a la humanidad. En este marco aparece la figura de Marcus Wright, un condenado a muerte que donó su cuerpo a la ciencia y que despierta de pronto en ese futuro post-apocalíptico. En su búsqueda de respuestas (a la pregunta ¿Qué carajo hago yo aquí? que nos hacemos todos), su camino se unirá al de Connor con resultados… relativamente sorprendentes. Me explico. De no ser porque en el trailer te dicen que Marcus Wright es una máquina con cerebro humano (Lo que llamaremos ahora un Humanator), uno se hubiera quedado pasmado en el cine. ¡Exacto! Los guionistas intentan ocultarte la verdad sobre Humanator durante más de la mitad de la película cuando todo el que acude a verla, gracias a la extraordinaria campaña de publicidad, sabe que es lo que le pasa al pobre de Wright.


 "¿En serio que no sabías que eras un robot? ¿No has visto el tailer?"

El desarrollo de la trama es muy correcto y efectivo durante la primera mitad del metraje, dedicada prácticamente a la aventura estilo Mad Max de Wright, pero se acelera de manera muy forzada y mediocre en la segunda. Como si de repente todos tuvieran prisa por acabar, además de que el sentimiento de que los personajes corren peligro es nulo. Por lo tanto, la sensación agobiante de los flashbacks guerrilleros de Kyle Reese en la primera Terminator, se pierde por completo.
Y ya que hablamos de cosas que se pierden, hablemos de cómo el mito del profeta guerrero salvador de la humanidad John Connor se ha quedado en los Noventa. Christian Bale hace lo que puede para mantener a flote su personaje (esta frase va a tener gracia más adelante), pero el guión ayuda poco… muy poco. Se puede resumir en que pasa la mayoría de sus escenas sentado con cara de mala leche, como esperando a que algo ocurra. El protagonismo se lo lleva Marcus Wright, interpretado por Sam Worthington, el nuevo protegido de James Cameron gracias a la esperada Avatar (Según parece, cuando Worthington le dijo a Cameron “hey tío, soy el nuevo Terminator ¿me das algún consejo?”, Cameron simplemente le contestó “No la cagues”). Al igual que Bale, Worthington lucha por sostener un rol muy mal desarrollado. Pero lo peor es que ambos personajes, en lugar de multiplicar por dos la calidad de la película, la dividen. En un intento de enfocar las dos personalidades, los guionistas logran magistralmente anularlas a ambas ¡Genial! Pero en lo que anular personajes se refiere, la palma se la lleva la guapísima Bryce Dallas Howard, que interpreta a una ecografía con patas; los breves momentos que aparece, casi sin frases, son para que veas su barriga embarazada y como la besa Bale. Nunca he visto una manera tan torpe de mostrarnos que el prota de una peli va a tener descendencia. ¿Y qué decir del Cameo más esperado en años? Tú y yo lo sabíamos, sí, pero ninguno se atrevió a decirlo antes: Arnold “Chuache” Schwarzenegger aparece… pero no del todo. Al estilo Beowulf, Chuache presta su rostro que es implantado por ordenador encima de un tío cachas (su foto con su propia cara, más abajo). El resultado no puede ser más cutre; en esta era de los efectos especiales, parece mentira que el ordenador cante tantísimo… ¿Por qué no hicieron lo mismo que con Oliver Reed en Gladiator? Si no fuera por los extras del DVD, nunca hubiera imaginado que muchas de las escenas de este hombre fueron rodadas… después de que él muriera. Implantaron por ordenador su cara encima de la de otro actor y nadie en el planeta se dio cuenta. Sin embargo, el 3D Chuache queda tan horrible que solo lo muestran durante dos planos, lo justo para meterle fuego y que salga el robot esquelético T-800 que tan bien conocemos todos.


¡Kiaaa, mañooo! Este hombrecillo llamado Roland Kickinger pone el cuerpo (que no la cara) al Chuache T-800

Una vez dado el repaso a los actores y a la trama, me gustaría centrarme las cosas que hacen que le pierda el respeto a una película: los divertidos fallos de coherencia. Emerson dijo que “Las coherencias tontas son la obsesión de las mentes ruines”, pero obviamente Emerson no iba mucho al cine. Me gustaría saber que hubiera opinado Emerson de lo que voy a decir ahora (si es que él hubiera ido a ver Terminator Salvation). Estos fallos normalmente van en cadena – como estáis a punto de ver – y desmoronan la credibilidad y sentido del argumento y los personajes.


"¡Hey, Murray! Dicen que Connor anda por el edificio. Hay que estar atentos ¡Podría estar en cualquier parte!"

Como dije antes, los líderes de la resistencia reciben una clave de un informador anónimo para destruir Skynet, así que inmediatamente organizan un ataque mundial. Y yo me pregunto ¿no sería sensato averiguar quién es ese informador y como puñetas ha conseguido él solito la clave para anular la mayor inteligencia del planeta? Pero no. Los lideres de la raza humana no son ruines, como lo soy yo, por lo que acaban muertos. ¿Muertos?, Ale, ¿has dicho muertos? Sí, muertos, ¿Por qué? Porque el informador anónimo era el mismísimo Skynet tendiéndoles una trampa.
Pero, tranquilos, las máquinas también tiene su lado sin sentido. Llegados al final, descubrimos que todo es un plan de Skynet para matar a John Connor (oh, cómo no). Ignorando la omnisciencia espacio-temporal que parece tener Skynet en esta película (mágicamente conoce el pasado y el futuro de Connor y sabe que debe exterminarlo cuando aún no se ha convertido en la amenaza que debía erradicar en las tres primeras partes, incluso parece saber quién es Kyle Reese cuando en las otras películas no lo sabía), uno no se explica porque esta I.A. súper avanzada le cuenta, con el rostro de Helena Bonham Carter, sus malvados planes a Marcus Wright, un peón. Al parecer, Humanator es un modelo experimental de Terminator para infiltrase entre los humanos (como el T-800 pero con labia) y lograr que Connor confíe en él para poder atraerle hacia la trampa que ha montado Skynet. Entonces, la Bonham Carter le comunica a Humanator que tiene un chip en la nuca con el que puede controlarle… y como quien no quiere la cosa, este se abre la cabeza y se quita el chip... pues menuda mierda de control. Ah, sí, y como venganza por tan cruel manipulación, rompe la pantalla donde aparece la cara de la esposa de Tim Burton.


Hola Skynet ^^

Una pregunta que me surge cuando Wright se infiltra dentro de las instalaciones de Skynet es por qué camina como un Ninja y se mueve de esa forma entre las sombras cuando el sistema de seguridad le ha dado completo acceso al lugar… Quizás al chaval le apetecía jugar a los comandos. Todos lo hemos hecho alguna vez en el pasillo de nuestra casa.

Para el final he querido hacer un TOP 3 con los momentos que más me han impactado:

3º  El rapero Common (que interpreta a la mano derecha de Connor) deja sin sentido a Humanator de un culatazo de rifle en la cara… ¿Quién nos iba a decir que era tan fácil derrotar a un Terminator? Más si tenemos en cuenta que antes de llegar al culatazo, Wright cayó en un río a toda velocidad desde una nave (e hizo varias “ranitas” en el agua) sin enterarse y que permaneció consciente después de que una mina le estallara en la pierna.

2º  La nueva habilidad de combate del T-800: empujar. Sí, damas y caballeros, eso es lo que hacen los Terminators en esta película: empujar. En la primera escena de Terminator (la de James Cameron), le arrancaba el corazón a un tipo. En esta, empuja. Y perdonad que insista, pero es lo que hace durante la pelea final; empujar a Connor una y otra vez durante diez minutos. Cada vez que lo ve, lo empuja. Y cuando Connor se levanta, lo vuelve a empujar. Sí, señor, esa es la sanguinaria máquina de matar que todos conocemos.

1º  El primer puesto se lo lleva el momento más sorprendente que he visto en mucho tiempo. Connor y Wright, frente a frente en el río, sellando una alianza. Wright le pide a Connor que confíe en él. Connor acepta. Wright se aleja. Connor le grita:
“¿Quién eres?”
Y Humanator le responde, triste y metafísico, mientras se deja llevar por la corriente, río abajo:
“No lo sé…”
Y mi mente le puso la coletilla:
“Pero floto”.
Correcto. En esta película los Terminators de acero y hierro que hacen cráteres de impacto cuando caen al suelo flotan. ¡¡Flotan!! ¡¡¡FLOTAN!!!

Pero no todo va a ser negativo. Voy a ser buena persona y os voy a hablar de los puntos buenos de Terminator Salvation: algunos planos y detalles de las escenas de acción son estupendos (Connor en el helicóptero) y al fin averiguamos como se hizo John la cicatriz que lucía en el rostro al principio de Terminator 2. ¡Ah! Y los T-600 quedan muy bien como robots torpes y toscos, antesala de los sofisticados T-800… que empujan a la gente.

James Cameron supo plantear estupendamente grandes enigmas filosóficos de la Ciencia-Ficción, como son la violencia en la naturaleza humana, la posibilidad de cambiar o no el futuro… Llegados a este punto creo que empiezo a vislumbrar cual es la pregunta de McG: ¿Quiénes son más estúpidos, los humanos o las máquinas?

PD. En esta película aparece el T-800 ocho años antes de que fuera fabricado según la cronología de las anteriores películas… Si es que soy de lo más ruin.

Corto de animación: Croissant de Triomphe



Mickey Mouse, el símbolo indiscutible de Disney, vuelve tras varios años sin protagonizar ninguna película, ya sea largometraje o cortometraje, y lo hace a lo grande, con una vuelta a los orígenes de la animación tradicional y el diseño clásico del personaje al principio de su existencia. Así, nos vamos con el ratón a París en busca de peripecias. Qué mejor forma de estrenarnos en la animación que con el icono animado por antonomasia en Croissant de Triomphe.



Momentazos: I thought I'd lost you, boy!

Elegir un solo momentazo dentro de Indiana Jones y la última cruzada (Indiana Jones and The Last Crusade, Steven Spielberg, 1989) es dificil, así que diré que PARA EMPEZAR he seleccionado este. Quizás dentro de un tiempo, en uno de esos instantes cinéfilos en los que el amor por Indy nos sale por los poros, le dediquemos un larguísimo especial a esta magnificencia.

El doctor Henry Jones, junior (Harrison Ford), ha rescatado a su padre el doctor Henry Jones, senior (Sean Connery), del "vientre de ese monstruo de acero", pero no ha podido evitar despeñarse por un precipicio hacia una muerte segura. Henry, Sallah (John Rhys-Davies) y Marcus (Denholm Elliott), el grupo de aventureros más rocambolesco del cine, corren al borde y...


Las actuaciones, la simpleza del guión al que no le falta ni le sobra nada y la duración y colocación de los planos (los cuatro mirando al vacío... esa foto...) concentra la esencia de la película en un momento de verdadera catarsis. El padre que siempre está desaprobando al hijo se desmorona y lo abraza en uno de los momentos más tiernos de la película. Tras esto, recupera la entereza y la compostura... pero solo por un instante: la emoción de la aventura corre por sus venas y necesita más. Vemos una breve luz ahí, un flash, y descubrimos de donde ha sacado Indy esa personalidad que tanto nos marcó de niños.

Y encima el vientro trae de vuelta el fedora, un personaje más, que, como Indiana, saltó del tanque antes de que se estrellara y ahora vuelve para continuar con el viaje.

Estoy dispuesto a salir a la calle a darme de hostias contra el que diga que la palabra "magia" no se puede usar para definir el cine.








viernes, 22 de marzo de 2013

Trailers añejos: El Señor de los Anillos (Teaser de la trilogía)




Mi querido Frodo:

Faltaba poco para que el año 2000 de la Segunda Edad llegara a su fin cuando apareció el teaser de uno de los eventos cinematográficos que más estaba dando que hablar entre frikis y revistas especializadas (Internet ya estaba pegando con fuerza, pero desde luego estaba muy lejos de la viralidad de hoy en día).

En este primer avance de la magna adaptación de Peter Jackson se aprecian escenas de La Comunidad del Anillo (The Fellowship of the Ring, 2001), pero también algunos breves instantes de Las Dos Torres (The Two Towers, 2002) y de El Retorno del Rey (The Return of the King, 2003). El video se pasa un poco del minuto y medio, la mayoría del cual nos regala la archiconocida imagen de la Compañía del Anillo en su totalidad recorriendo la Tierra Media; un momento que se ha quedado grabado en la retina de muchos. El trailer es sutil, enseña poco y mucho, una joya publicitaria ¿Qué mejor manera de abrir boca?







Y de regalo el SEGUNDO avance:




jueves, 21 de marzo de 2013

Videoteca: The Wonderful Wizard of Oz (1910)



Basada ligeramene en el musical de 1902, The Wonderful Wizard of Oz de 1910 es la primera adaptación cinematográfica de la novela de L. Frank Baum, tan de moda ahora por la nueva versión de Sam Raimi.




Guión y dirección: Otis Turner, basado en la novela de L. Frank Baum
Reparto:
Bebe Daniels     ...    Dorothy Gale
Hobart Bosworth     ...    Wizard of Oz and King
Eugenie Besserer ...    Aunt Em
Robert Z. Leonard ...    Scarecrow
Winifred Greenwood ...    Momba
Lillian Leighton ...    Union Enforcer
Olive Cox     ...    Glinda the Good

domingo, 17 de marzo de 2013

Momentazos: Alma, this is Jack Twist

Esta escena de Brokeback mountain lo cambia todo. Alma (Michelle Williams) descubre que su marido mantiene una relación clandestina con otro hombre. No se trata sólo de un momento determinante en el desarrollo argumental de la película, sino uno de esos extraños momentos de verdad. Ennis (Heath Ledger) y Jack (Jake Gilenhaal) se aman de verdad, se han echado de menos, les duele ese amor oculto. Pero esta escena es ella. Wiliams se come la escena sin apenas hablar. Esto es cine. Con todo, la Academia optó por concederle el Oscar a mejor película a Crash en lugar de a la obra de Ang Lee.

lunes, 11 de marzo de 2013

Noticias: "Porno", Trainspotting 2, a la vista.

Esto lleva mucho tiempo en marcha, siempre hubo un plan a largo plazo para ‘Trainspotting 2’


Irvine Welsh escribió "Porno", secuela de su novela "Trainspotting", en 2002 y desde entonces el bueno-a-ratos de Danny Boyle (bueno-a-ratos porque es capaz de alternar peliculones con ladrillazos) ha estado meditando adaptarla, pero tal evento cinematográfico no tendrá lugar hasta 2016, cuando se cumplan 20 años del estreno de la película de culto y a Ewan McGregor se le haya pasado el resquemor que tiene con el director. Tranquilos, amigos de la película, el dinero es la mejor pomada para los cabreos.

Trailers: Las brujas de Zugarramurdi

Lo último que pudimos ver de Alex de la Iglesia fue la descafeinada La chispa de la vida, trabajo por encargo que se alejaba del imaginario loco y personalísimo del autor vasco. Sin embargo, este año vuelve con una nueva película llena de rarezas y rostros conocidos (Mario Casas, Hugo Silva, Terele Pávez...): Las brujas de Zugarramurdi. ¿Estará a la altura de El día de la bestia?

domingo, 10 de marzo de 2013

Trailers: Ayer no termina nunca

Y en abril nos llega Ayer no termina nunca, la nueva y ultarsecreta cinta de Isabel Coixet, que por una vez ha dejado los grandes presupuestos y destinos internacionales para volver a una historia íntima, de dos personajes interpretados por Javier Cámara y Candela Peña en lo que tiene pinta de ser uno de los tour de force interpretativos del año.




sábado, 9 de marzo de 2013

Momentazos: Si ni siquiera sabes usar esa cosa...



Situaciones desesperadas requieren medidas desesperadas. Y Lola está tan enamorada de Manni que haría cualquier cosa por él, incluso tratar de atracar el banco en el que trabaja su padre por evitar que la mafia haga trizas a su novio. Esto ocurre, cómo no, en Corre, Lola, corre, una película tan espídica que valdría como sustituto de una sesión de gimnasio o de un chute de crack, dependiendo del respetable hobby de cada uno.

La extravagancia formal de Corre, Lola, corre esconde una historia estrictamente realista. Tom Twyker espera pacientemente a que la primera carrera de Lola termine antes de mostrar sus cartas. Sólo ahora el director nos permite comprender lo que realmente es Corre, Lola, corre: un juego de hipótesis paralelas, en el que la verdadera podría ser cualquiera o ninguna. Pero Twyker se muestra engañosamente cristalino a este respecto: quiere hacernos creer que ya ha trazado por completo el esqueleto de su película... cuando aún no lo ha hecho.

Durante el primero de los tres qué pasaría si de la película Lola le quita el arma al guardia de seguridad de un supermercado, pero al ser la primera vez que empuña una pistola, necesita la ayuda de Manni para quitar el seguro. El segundo qué pasaría si pone a Lola en la delicada situación de amenazar con disparar a su padre dentro de su propio banco con la esperanza de conseguir el dinero que necesita, y de nuevo empuña por primera vez un arma. Y para sorpresa del guardia de seguridad, nuestra y de la propia Lola, la chica sabe cómo desbloquearla.




Es el mejor momento de toda la película. Con un sencillo y perturbador gesto, con apenas una nota en el guion, Twyker derriba su propio castillo de naipes, concienzudamente construido sobre la base de la verosimilitud, y nos obliga a aceptar lo inaceptable: que las diferentes versiones que estamos viendo no son alternativas respecto a las otras, sino que de algún modo han ocurrido correlativamente.

Y sin recurrir a purgatorios.

Trailers: Las flores de la guerra



Dirigida por Zhang Yimou (La casa de las dagas voladoras, Hero) con Christian Bale en el papel principal.


Trailer: The Bling Ring

Ya tenemos trailer de lo nuevo y esperadísimo de Sofia Coppola, una de esas directoras que tiene seguidores y detractores a partes iguales. Lo nuevo, en fin, se trata de The Bling Ring, cinta basada en una historia real sobre un grupo de jóvenes en Los Angeles que se dedican a robar en mansiones de lujo. En el reparto, ni más ni menos que Taissa Farmiga (hermana de Vera Farmiga, vista recientemente en la primera temporada de American Horror Story) y, sobre todo, una Emma Watson que se está labrando un carrerón lejos de la Hermione Granger que la catapultó a la fama.
El trailer, como sigue:

Noticias: Sam Mendes no dirigirá el próximo 007

Recordemos que se cumplen 50 años en el cine del espía británico. A pesar del indiscutible éxito de Skyfall, a todas luces la mejor cinta de la saga protagonizada por James Bond, el director Sam Mendes (American beauty) ha tenido que rechazar la oferta para dirigir la próxima entrega debido a su compromiso con el teatro y proyectos televisivos (prepara una serie para Showtime). No obstante, se muestra agradecido a los productores por volver a contar con él para dar forma al próximo episodio de la filmografía del agente secreto.
A pesar de ello, los seguidores de Bond pueden respirar tranquilos. Quienes ya han confirmado su implicación en el siguiente proyecto cinematográfico son Daniel Craig y la recientemente oscarizada Adele.

viernes, 8 de marzo de 2013

Noticias: Mark Hamill, confirmado.


 
Su Alteza Imperial George Lucas lo ha confirmado hace unas horas: Harrison Ford, Carrie Fisher y, por fin, Mark Hamill estarán presentas en la nueva entrega de la saga de películas más importante de la cultura popular mundial (a los que os digan "bah, sólo es una peli", dadles un babuchazo empapado en mierda en el hocico, porque no saben en qué planeta viven).

La historia es alto secreto, pero ya se sabe que la trama de la nueva trilogía se centrará en las aventuras de los hijos de los héroes originales y hasta aquí puedo leer. Al mando, como todos sabemos ya, está alguien que sabe cuidar el tema de los spoilers (quizás en las películas que esten por venir podamos volver a sorprendernos), J.J. Abrams, pero no estará solo: en la titánica responsabilidad de llevar a buen puerto esta nueva empresa le acompañarán Lawrence Kasdan, guionista de El Imperio Contraataca y asesor de El Retorno del Jedi, y el magno John Williams, quien ha asegurado que lleva tiempo deseando poner en funcionamiento las melodías que lleva tiempo maquinando en su cabeza.

Ahora a esperar hasta el 2015.




Trailers: Much Ado About Nothing


Mucho ruido y pocas nueces. Shakespeare según Joss Whedon.



Trailers: After Earth


 
Pendientes de lo nuevo de M. Night Shyamalan.


miércoles, 6 de marzo de 2013

Momentazos: The End is Here

Buscando un amigo para el fin del mundo (Seeking a Friend for the End of the World), 2012, escrita y dirigida por Lorene Scafaria.

Tras ser encarcelados por un policía dispuesto a hacer cumplir la ley incluso a las puertas del Apocalpsis, Dodge (Steve Carell) abraza a una desconsolada Penny (Keira Knightley) que se culpabiliza por la situación en la que se encuentran, mientras el tipo del letrero de "The End is Near" se siente en paz consigo mismo por estar viviendo esos últimos días que tanto había estado esperando.


El espectador observa la escena detrás de los barrotes de su propia celda. Todos estamos condenados.



lunes, 4 de marzo de 2013

Videoteca: El castillo encantado (1896)



Le manoir du diable: dirigida, escrita y protagonizada por el maestro de los efectos especiales George Méliès (interpretando aquí al demonio-vampiro-hechicero Mefistófeles), autor de la famosa Le voyage dan la lune (1902) y al menos otros 555 títulos más.


domingo, 3 de marzo de 2013

Trailers añejos: Tiburón (1975)



Dirigida por Steven Spielberg y protagonizada por Roy Schieder, Robert Shaw y Richard Dreyfuss.

Y os quejáis de que hoy en día los trailers practicamente te cuentan toda la película.

sábado, 2 de marzo de 2013

Momentazos: Lois en camiseta.



Superman II, versión Richard Lester (1980): Kal-El (Christopher Reeve) habla con su madre (Susannah York) en la Fortaleza de la Soledad sobre su amor por Lois Lane (Margot Kidder). El héroe se ve obligado a elegir entre su novia y sus superpoderes mientras la chica presencia la escena en un camisón blanco de abuela. Momentos después, Superman se convierte en humano y Lois se lo agradece acostándose con él.

Superman II, versión Richard Donner (2006): tras una escena de cama, Superman, vestido como Clark Kent, se enfrenta a su disgustado padre Jor-El (Marlon Brando), quien opina que su hijo se comporta de forma egoista al dejar de lado su misión de protector del planeta por una mujer común. Después del sermón, le da a elegir entre ser Superman o un humano más. Kal-El entra en la cámara donde se verá librado de sus poderes mientras Jor-El lanza una dolida mirada de desprecio a Lois, que ha contemplado toda la escena vestida únicamente con unos calcetines y la camiseta de Superman que ha cogido al levantarse de la cama.

Reseñas viejunas: Bajo los puentes (1946)


Hace unos años la Universidad de Granada proyectó un ciclo de cine alemán clásico cargado de rarezas. Así pude ver Bajo los puentes, de Helmut Käutner, director alemán conocido principalmente por su película El capitán Köpenick (título mal traducido al español, ya que Köpenick es la ciudad de procedencia del protagonista), por la que estuvo nominado al Oscar a Mejor Película de Habla no Inglesa.
            Bajo los puentes se rodó en Alemania en 1945, casi nada, basándose en la novela Bajo los puentes de París de Leo de Laforgue, y es considerada por Käutner su película favorita. Hay que tener en cuenta el contraste entre la situación del país durante el rodaje y la historia que se narra. No sólo la trama, sino el tono dado por el director para lograr un film atemporal y necesario en tiempos duros.
            La historia gira en torno a tres personajes unidos en un triángulo amoroso. Hendrik y Willy son dos marineros fluviales que van de puerto en puerto a lo largo del Havel y del Spree transportando cosas de unas ciudades a otras. En el trayecto que nos ocupa, el destino final es Berlín. Al principio conocemos la vida de ellos, su espíritu libre y su afición por las mujeres de una noche, así como la decisión de que ya ha llegado el momento de asentar sus vidas y buscar una pareja estable, casarse con una mujer respetable. Un poco más adelante aparece Anna, una joven hermosa y triste que observa desde encima de un puente de Potsdam y que ellos acogen en su barco por temor a que se suicide. Aunque al principio reticente, al final opta por llegar a su destino con ellos en un camarote separado, e inevitablemente nace la atracción entre los tres. Los dos marineros se enamoran de Anna, que logra lidiar con ellos hasta que llegan a Berlín a la vez que oculta un secreto personal. Una vez en la capital, las declaraciones se suceden y la historia de amor se complica debido a las decisiones de ambos hombres, quienes no logran ocultar su recelo por el secreto que guarda Anna. El conflicto se resuelve pacíficamente del mejor modo posible para los tres protagonistas.
            Bajo los puentes destaca por varios aspectos, como la perfecta armonía entre amor, drama y comedia, todo rodado de un modo poético y sencillo. El contexto aquí es importante, ya que la decisión de crear una historia atemporal y alejada de la política obligó a Helmut Käutner a limitar los espacios visibles de una ciudad consumida por la guerra, Berlín, y así evitar la censura. De este modo los escenarios son limitados, y la ciudad sólo muestra interiores frente a los planos externos rodados en el río, puente arriba y puente abajo. Bajo los puentes se dan los encuentros de los marineros con las chicas guapas de las distintas ciudades, y bajo un puente pasaban cuando avistaron a Anna allí arriba, toda lágrimas y secreto; del mismo modo, es bajo un puente el lugar donde la joven descubre su secreto en una secuencia montada con acierto y buen gusto.
            Podría ser otra película más, cualquier otro clásico. Podrían disgustar los tics propios de los actores de la época, que en muchas ocasiones sobreactuaban a falta de otro método. Podrían incluso destacarse varios puntos álgidos y descartar el resto del metraje. Pero no, porque es probablemente una de las películas más personales de un director que en lugar de rendirse y dejar de dedicarse al cine, consiguió sacar a flote (y nunca mejor dicho) un proyecto lleno de poesía y belleza en un universo que se tambaleaba sobre sí mismo.

Videoteca: Alicia en el País de las Maravillas (1903)





Título: Alice in Wonderland.
Año: 1903
Director: Cecil M. Hepworth.
Guión: Cecil M. Hepworth, basado en la novela Alice's Adventures in Wonderland de Lewis Carroll.
Reparto: May Clark....................................Alice
Cecil M. Hepworth........................................Frog
Blair......................................................Large dog
Geoffrey Faithfull.........................................Card
Stanley Faithfull...........................................Card
Mrs. Hepworth..................White Rabbit / Queen
Norman Whitten......................Fish / Mad Hatter






¡Cogedla ahí!